domingo, 9 de noviembre de 2008

MI PROPIO CIELO

Esta tarde podría entregarte mi alma, pero esta triste pues te a perdido, podría
escribirte el mas hermoso de los poemas, pero seria inútil, tanto como decirte
que mil lágrimas e vertido en tu nombre que tanto recuerdo y amo.
Tantas lágrimas que tengo miedo de mirarlas pues brillan quietas resignadas a
morir por un amor que no a de volver, quietas en el suelo como las estrellas a lo
lejos en el cielo infinito de una noche que debería ser nuestra, como tantas que si
lo fueron pero que hoy son lejanas como las estrellas en el firmamento y tan
ciertas como las lágrimas en mi suelo.

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