funeraria presidentes.

con arena en los ojos desperte del sombrio atardecer
desperte sudando y con un sabor de boca un poco amargo
no recordaba todavia nada, el sabor era inusual
parecia que nunca lo habia probado, ni de sus labios carmesí
era hora de parar la vida, de suplantar los riesgos por medidas
se podria decir que drasticas, pero lo definitivo no podia apelarse
asi fue aquella tarde tome el control y me esforce en no caer al suelo, maldita gravedad
una y otra vez el impulso me desenterraba
colina abajo
donde los muerto se escondia a suplicar por su bienvenida,en el regazo de su madre, en la calma
de la injusticia,fue otoño, se desprendian las hojas, por que eso es lo comun...
fue un corazon roto, por que asi debia ser...
fue un silencio, por que muerto estaba el.